Responsabilidad Social Empresarial

Cuando se habla de Responsabilidad Social Empresarial, RSE, en realidad no se hace referencia a un tema nuevo que garantice la supervivencia de las organizaciones. Se trata de una preocupación que siempre está presente con altas dosis de innovación.

Para que una empresa tenga permanencia en el mercado o en la sociedad debe trabajar estrategias que integren su misión para poder alcanzar la visión que es la meta en el mediano plazo.
Uno de los ejes fundamentales de la RSE tiene que ver con la interacción de los diferentes grupos de interés, por eso la innovación encuentra ahí enormes desafíos ya que debe estar atenta a los requerimientos y necesidades de sus clientes, proveedores, la sociedad, los accionistas, los empleados y entes estatales.

Innovar significa replantear las relaciones y hacerlas más cercanas para poder crear equipos de alto desempeño. Como ejemplo de esta línea de acción mental puedo mencionar a Epopeya Everest sin límites, la expedición que el pasado mes de mayo llevó a varios colombianos a las más altas cimas del mundo, luchando contra sus miedos mediante retos en el plano físico, mental y ambiental. Estos héroes de carne y hueso llevaron dentro de su morral muchos nuevos pensamientos y también un compromiso de proteger ese medio ambiente majestuoso que representa la montaña, el cambio climático y el ecosistema. Todos temas de actualidad que han estado presentes en el que hacer del mundo, pero que contienen una buena dosis de creatividad para vivirlos de manera novedosa.

Hace poco tuve la oportunidad de conocer personalmente a Nelson Cardona, un verdadero héroe. Perdió su pierna en un accidente en el Nevado del Ruíz pero no perdió su visión de alcanzar los 8.800 metros de altura en el Everest con ayuda de su pierna artificial.

Fue una hazaña que contó con importantes dosis de innovación, fue necesario cambiar su propio pensamiento y el del grupo de expedicionarios que lo apoyó para alcanzar la cima.

Fue un espacio para innovar en publicidad porque muchos patrocinadores vieron en esta historia algo digno de ser apoyado económicamente. Eso muestra la esencia de la innovación en el pensamiento y en la forma de abordar a los diversos grupos de interés de lo que se llamó Epopeya Everest sin límites.

La sensibilidad de Nelson Cardona y su equipo de apoyo se hizo aún más evidente al vincular a la causa de los niños con VIH SIDA, otra de las preocupaciones del milenio y que hace parte del compromiso del mundo con prevenir la presencia de este virus en la humanidad. Ellos llevaron el símbolo de los corazones de la Fundación Planeta Amor en sus botas que representaron a miles de kilómetros de altura los grandes retos que tienen que enfrentar quienes viven y conviven con esta enfermedad.

Esta experiencia reúne a mi modo de ver importantes lecciones en el campo de la innovación. Una silla de ruedas hubiese podido ser el efecto posterior al accidente doloroso de este colombiano, sin embargo, su tesón y la claridad de vivir para cumplir un sueño, hicieron posible que el lema de Epopeya Everest sin límites sea un ejemplo de filosofía personal y organizacional que es capaz de transformar el mundo.

Transformar el planeta es algo con lo que finalmente soñamos todos y que podemos hacer desde el trabajo diario si pensamos en conectar a los diferentes grupos de interés que hacen posible llevar a feliz término desafíos que rompen las reglas. Para que esto sea posible es indispensable que la mirada sobre un problema, un tema social o un negocio tenga diferentes formas de ser vista.

Innovar es la clave para sobrevivir en un mundo globalizado donde la reproducción por vía digital debe facilitar la apertura de pensamiento en lugar de ponerle límites a nuestras ideas y lo que es peor aún a nuestros desafíos. Celebro que yo haya sido parte de los grupos de interés de esta Epopeya y que me haya conectado con un sueño personal que se convirtió en una aspiración colectiva.

Por Mónica Sarmiento Duque

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